Comentario y reflexión:
“Con la serpiente aparece una nueva figura en la narración, figura que ejerció una tremenda influencia sobre la historia subsiguiente del mundo. Moisés se aparta de su descripción de las condiciones perfectas del paraíso y va a la historia de la caída, por la cual esta tierra se transformó de un mundo de felicidad, amor y perfección en un mundo de dolor, odio y maldad. Moisés deja sin mencionar el período bienaventurado del Edén, el tiempo pasado en completa felicidad, en el estudio de la historia natural, en el cuidado del huerto como Dios había ordenado y en diaria comunión con el Creador en las horas frescas del atardecer (Gén. 3: 8).” CBA Genesis 3:1
Es importante notar en el relato, que la peor mentira es la que se procesa de una versión sutilmente caprichosa de la verdad, que agrade a los sentidos y que se acepte por razones egoístas. La mentira más peligrosa tiene un por ciento de verdad. Como el jugo de mago, ¿5% jugo?, “pero, a pesar del 95% de agua filtrada, ácido cítrico, azúcar y ácido ascórbico, ¡tiene un sabor delicioso!” De paso, ¿qué es el ácido ascórbico? “Realmente no pienso en eso cuando me lo tomo, porque tiene un sabor delicioso, debe de ser bueno.”
Jesus le llamó al adversario, eso significa su nombre, “padre de mentira”. Comienza con una verdad hibrida para llevar a la falsedad total, “eres realmente inmortal”, “serán abiertos vuestros ojos y seréis como dioses”, y “verás qué ‘cool’ es conocer el mal”. Ese es sólo el principio, en el camino encontrarás maldición y muerte.
Es sorprendente en nuestro tiempo “super post moderno”, o de post modernismo en esteroides, como cada uno tiene y refuerza su propia verdad con la ayuda de algoritmos. Se encuentran múltiples opciones de influenciadores, al gusto, cada uno con su propia versión de “seréis como dioses”. El jugo de mango es una de las opciones.
Las consecuencias fueron inmediatas y devastadoras para nuestros primeros padres. Lo que pareció “agradable a los ojos y deseable para alcanzar la sabiduría” se convirtió pronto en miedo, vergüenza y muerte. Pronto descubrieron que el pecado puede ser perdonado, pero que sus consecuencias son inevitables, Cuando perdieron a sus dos hijos, uno asesinado, el otro proscrito, se dieron cuenta que el enemigo no solo clava el puñal en el alma, si no que lo retuerce.
Para nosotros queda la lección, el pecado es engañoso y aleja al ser humano de Dios. El enemigo lo hace parecer inocente, pero termina causando la muerte y profundo dolor.
No creamos en las fiestas, los placeres, las riquezas a cambio de nuestra desobediencia al Creador. Todos esos caminos llevan a la destrucción y a la muerte. Si no lo creemos miremos al adicto, a la victima de un crimen, al bebe que perdió a sus padres en un accidente o en una explosión, a los padres que perdieron a su hijo joven por una sobredosis. El adversario te dirá que es mentira, que no le creas a tus ojos o a tus oídos, que vale la pena cambiar la familia y la vida por un momento de placer.
Si todavía no lo crees, mira al Calvario, allí esta colgando en una cruz el Cordero de Dios, su Hijo inocente, consumando el anunciado sacrificio, ofrecido a nuestros padres, acordado en el concilio celestial desde antes de la fundación del mundo, ofreciendo su vida para pagar el precio, para asestar el golpe mortal en la cabeza del adversario, para ofrecer esperanza, “para que todo aquel que en El cree, no se pierda, más tenga vida eterna.” Juan 3:16
Mira hoy al Calvario, escoge la fe, escoge la obediencia, escoge la vida.