Comentario y reflexión:
Es evidente en el capítulo 9 que el episodio del diluvio fue difícil y triste para Dios. Después de haberlos preservado durante el cataclismo universal, bendice nuevamente a sus criaturas y les recuerda que fueron creados a su imagen, que quien quita la vida a un ser humano, comete un grave pecado ante El.
“Para evitar que las nubes y las lluvias llenaran a los hombres de constante terror, por temor a otro diluvio, el Señor animó a la familia de Noé mediante una promesa, ‘Estableceré mi pacto con vosotros, ni habrá más diluvio para destruir la tierra.’” PP 85
Jehová coloca el precioso arcoíris en el cielo como la señal del pacto.
Dios es un Dios de compromiso, por eso hace pactos con sus hijos. Mediante los pactos da su palabra de protección, bendición y salvación. Los pactos vienen con una señal para ayudarnos a recordar, como los sacrificios, la circuncisión, el sábado, la Santa Cena y el arco iris.
El arco iris es un símbolo precioso de su gracia y de su misericordia, representa la oportunidad de comenzar otra vez después de la tormenta. Es un recordatorio de que su promesa para tiempos difíciles es firme, de que su compasión y su gracia trascienden a sus juicios. Desde Génesis hasta Apocalipsis, el arco iris es un símbolo visible de la presencia y del poder de Dios.
El vicio y la degeneración de los antediluvianos aparecen otra vez, nada menos que en el propio Noe y en su familia. Años después Noe se emborrachó y debido a su borrachera se desnudó en medio de su tienda. Cam lo vio y cometió el pecado de deshonrar a su padre mostrando a otros su desnudez. Algunos especulan que hubo algo más siniestro, pero no hay evidencia biblica que lo sostenga. Los argumentos para apoyar esta teoría son que, en Levíticos 18 la expresión “ver su desnudez” se refiere a actos de impureza sexual y que un acto inmoral de Cam con su padre pudo haber sido el origen de las prácticas homosexuales de los canaanitas.
Sea lo que haya sido, podemos aprender que un hijo debe siempre cuidar el honor de su padre, que debe proteger su honor, aunque su padre haya cometido errores. Honrar al padre y a la madre es un mandamiento de 10 en la Ley de Dios.
¡Cuánto necesitamos la gracia divina! Nadie está libre de errar, todos debemos velar, todos necesitamos su gracia.
“La información cronológica sobre la edad de Noé nos hace darnos cuenta de que Noé sirve como un eslabón entre las civilizaciones pre-diluvio y post-diluvio. Los últimos dos versículos de la historia anterior (Génesis 9:28-29) nos llevan de vuelta al último eslabón de la genealogía de Adán (Génesis 5:32). Debido a que Adán murió cuando Lamec, el padre de Noé, tenía 56 años, Noé seguramente debe haber escuchado historias sobre Adán, que podría haber transmitido a sus descendientes antes y después del Diluvio.” Folleto de ES, abril 25, 2022
“La genealogía bíblica tiene tres funciones. Primero, enfatiza la naturaleza histórica de los eventos bíblicos, que están relacionados con personas reales que vivieron y murieron y cuyos días están contados con precisión. En segundo lugar, demuestra la continuidad desde la antigüedad hasta la época contemporánea del escritor, estableciendo un claro vínculo con el pasado y el “presente”. En tercer lugar, nos recuerda la fragilidad humana y el efecto trágico de la maldición del pecado y sus resultados mortales en todas las generaciones que han seguido.” Folleto de ES, abril 25, 2022